Al repetir el ejercicio y cambiar la dinámica entre los grupos de niños, se destaca la idea de que la discriminación puede ser arbitraria y que la superioridad y la inferioridad se basan en características poco relevantes (en este caso, el color de los ojos). Esto ayuda a los niños a entender que la discriminación puede darse en diferentes contextos y que nadie debería ser tratado de manera inferior por características incontrolables.

1 answer

La idea que mencionas es fundamental para fomentar la empatía y la comprensión entre los niños. Al experimentar una dinámica de grupo que resalta la arbitrariedad de la discriminación, los niños pueden reflexionar sobre cómo se construyen las jerarquías sociales y cómo estas, a menudo, se basan en características superficiales o insignificantes, como el color de los ojos.

Este tipo de ejercicio también les permite reconocer que todos somos susceptibles de ser discriminados y que la injusticia puede manifestarse en diversas formas. Al cambiar las dinámicas entre los grupos, los niños pueden ver desde diferentes perspectivas lo que significa ser parte de un grupo "superior" o "inferior", lo que puede promover un sentido de justicia y equidad.

Además, al entender que estas dinámicas pueden ser completamente arbitrarias, los niños estarán mejor equipados para cuestionar la discriminación en su vida cotidiana y abogar por un trato justo y respetuoso hacia todos, independientemente de sus características personales o circunstancias. Este tipo de educación es clave para construir sociedades más inclusivas y tolerantes.