La opción que me permitió tener más dinero fue invertir en un fondo de ahorro que ofrecía interés compuesto. El interés compuesto es un mecanismo financiero que permite que los intereses generados no solo se calculen sobre el capital inicial, sino también sobre los intereses acumulados en períodos anteriores.
Esto significa que, a medida que pasa el tiempo, el dinero crece de manera exponencial en lugar de lineal. Por ejemplo, si invierto una cantidad y esa inversión genera intereses, en el siguiente período, el interés se calculará sobre la cantidad total (capital inicial más los intereses acumulados), lo que resulta en un crecimiento más rápido de mi dinero.
A largo plazo, esta acumulación de intereses sobre intereses puede marcar una gran diferencia en el monto total disponible. Gracias al interés compuesto, mi inversión no solo se mantuvo, sino que se multiplicó significativamente, lo que me permitió tener más dinero al final del período de inversión. Esta es la razón por la que comenzando a ahorrar e invertir lo antes posible puede resultar en grandes beneficios a largo plazo.